Crear un plan de estudio para aprender idiomas que funcione para ti
Saber otro idioma puede abrirte nuevas oportunidades profesionales y ayudarte a entablar relaciones. Si no cuentas con las herramientas o la estrategia adecuadas, también puede resultar francamente frustrante. Aquí tienes siete pasos que te ayudarán a evitar estos escollos y que contribuirán a que tus esfuerzos por aprender idiomas den sus frutos.
Aprender una nueva lengua puede ser un reto, pero también es increíblemente gratificante. Tanto si intentas aprender por trabajo, por estudios o simplemente por diversión, conocer otra lengua puede abrirte nuevas oportunidades profesionales y ampliar tu capacidad para entablar relaciones con personas de todo el mundo. Dicho esto, si no cuentas con las herramientas o la estrategia adecuadas, también puede resultar francamente frustrante. Para ayudarte a evitar estos escollos, aquí tienes siete pasos que te ayudarán a garantizar que tus esfuerzos por aprender idiomas den sus frutos:
1. Revisa tus metas y objetivos
Todos tenemos diferentes motivos para aprender una nueva lengua. Algunos están motivados por objetivos profesionales, otros quieren poder leer sus libros favoritos en la lengua original, y otros simplemente quieren viajar más. Sea cual sea tu motivo, tienes que asegurarte de que sea alcanzable y realista. No sirve de nada que te prepares para el fracaso si no tienes tiempo o recursos disponibles.
Una forma de hacerlo es elaborar una lista objetiva de tus objetivos antes de iniciar cualquier plan de estudio de idiomas. Por ejemplo:
- Quiero que mi nivel de español sea conversacional para el 1 de junio, porque tengo previsto hacer un viaje al extranjero durante ese periodo y quiero tener la oportunidad de hablar con los lugareños utilizando su lengua materna.
2. Evalúa tu situación actual
Una vez que tengas una idea general de cómo es aprender idiomas, es hora de evaluar dónde te encuentras actualmente.
Examina tus conocimientos lingüísticos actuales. ¿Cuáles son tus puntos fuertes? ¿Cuáles son tus puntos débiles? ¿Hay ciertas partes de la oración o tiempos verbales que te hacen tropezar más a menudo que otros? ¿Necesitas memorizar más palabras de vocabulario o practicar el habla con confianza y precisión en la lengua meta?
Averigua qué recursos tienes a tu disposición. ¿Dónde puedes encontrar herramientas baratas pero eficaces para aprender idiomas online u offline -como aplicaciones, fichas o libros- y cuáles me proporcionarán el mejor rendimiento de la inversión por mis esfuerzos?
Calcula cuánto tiempo y dinero puedo dedicar al aprendizaje de esta nueva habilidad. ¿Podré dedicar una hora al día a practicar mi comprensión auditiva mediante podcasts cada mañana antes de empezar a trabajar; tres horas los fines de semana; diez minutos aquí y allá a lo largo de la semana?
3. Establece un calendario
Ya tienes tu plan de estudio, y ahora es el momento de establecer un calendario. Un calendario es la fecha concreta que fijas para alcanzar un objetivo concreto: en este caso, aprender un nuevo idioma.
Por ejemplo, si tu objetivo es ser capaz de mantener una conversación en un mes, tu línea temporal sería "Seré capaz de mantener conversaciones básicas con la gente el 1 de julio". Si tu objetivo es a más largo plazo (como hablar con fluidez), el plazo sería más largo: "Hablaré con fluidez en enero de 2024". En algunos casos, como cuando intentas aprender a leer música o dominar el cálculo, ¡puede que ni siquiera necesites un calendario! Pero para la mayoría de nosotros, simples mortales que queremos enriquecer nuestras vidas con otra lengua o habilidad (o dos), fijar un plazo realista
Deja una respuesta